Quien tiene un amigo... tiene un tesoro
«No importa la DISTANCIA que nos SEPARE, lo que importa es que hay un CIELO que nos UNE»
Como bien dice el titulo «Quien tiene un amigo, tiene un tesoro». Afortunadamente, tengo el privilegio de poseer unos cuantos tesoros, no muchos porque estan muy cotizados y también hay que saber filtrar… 😉 jeje…
Uno de esos tesoros de los que presumo, es un amigo muy especial llamado José Cortés, y que se ha ganado el título de «amigo» con creces. Antes de amigo, fue mi compañero en una fábrica de automóviles.
De cómo nos conocimos…

Apuntando maneras desde pequeña…
Desde pequeña he escrito cartas y cartas, la mayoría de ellas con una imaginación desbordante que plasmaba en las mismas. Eran cartas muy elaboradas y muy divertidas donde:
- a veces metía recortes de periódicos y revistas a modo de collage
- otras veces escribía la carta y al terminar el folio continuaba escribiendo desde el principio de la hoja con otro color de boli, y escribía entre líneas
- algunas eran como acertijos y podían resultar difíciles de leer
Aquellos que recibieran mis cartas en aquella época, en la que no existía ni el móvil ni internet, comprobarían que no me gustaba la rutina y que intentaba que fueran cartas divertidas para que el receptor se divirtiera tanto como yo al crearlas. He de confesar que alguna vez me pasé de creativa y más de uno debió sufrir para descifrarlas, pero nadie dejó de escribirme, lo que me hace pensar que les gustaban o que eran masocas, ¡jejeje!
Hoy en día, recibir una carta es algo extraordinario, y aunque ya no escribo tantas como antes, todavía conservo todas las que recibí numeradas (una que es rarita… 😛 ) .
Curiosa obsesión
Quien me conozca desde hace años, sabrá cual era mi obsesión por escribir cartas, así como de recibirlas.
Si yo era la primera que llegaba a casa del colegio, instituto o universidad, me iba directamente al buzón para ver las cartas que habían llegado ese día. Era un momento muy especial y emocionante. Si ya había alguien en casa, la pregunta era la de siempre, y confieso que tenia a mis padres machacados con la misma pregunta todos los días, «¿cuantas cartas he recibido?». Todos los días tenía, al menos, una carta.
Y era todo un ritual
- el mirarlas,
- abrirlas,
- leerlas,
- clasificarlas,…
Me gustaba imaginar todo el viaje que habían hecho esas carta desde distintas partes del mundo, pasando de mano en mano hasta llegar a las mías.
¿ y porqué cuento esta historia de las cartas? Más abajo lo entenderéis… 😉 pero ya os adelanto que, LAS CASUALIDADES NO EXISTEN…
A contracorriente de las Relaciones Líquidas

¡ Y…Sorpresa!

La palabra «GRACIAS»: palabra en desuso

Son muchos los homenajes que José ha hecho a la tierra aragonesa. Entre muchas de las entradas que le ha dedicado, destaco:
- a los cinco magníficos del Real Zaragoza,
- a los amantes de Teruel
- y una recién entrada en su blog a nuestro querido y recién fallecido Carlos Saura, nacido en Huesca.
Otra de las figuras que ha plasmado en sus diseños en varias ocasiones ha sido la de Jose Antonio Labordeta, del que os hable hace un tiempo en mi blog . He tenido la suerte no solo de tener varios diseños que hizo en su día , sino también tengo sellos de curso legal con la figura de Labordeta.
Los Sellos de Ficción pueden llegar a convertirse en sellos de curso legal ¿lo sabías? pues sí, aquí tienes el enlace por si te apetece saber cómo…

Insisto, pasead por la página de José. No os defraudará. En ella descubriréis preciosos diseños con historias curiosas, que seguramente no conocéis.
Aunque ya he dicho que no envío ya casi cartas, hay una ocasión especial: me gusta enviar en navidad felicitaciones especiales con sobres diseñados por José a mis amigos repartidos por el mundo. Me gusta, que a través de esas cartas con sobres únicos, mis amigos puedan transportarse a un lugar que yo considero que es especial para ellos, como puede ser su lugar de origen si estan fuera de su tierra.
Si te interesa alguno de sus sobres o sellos de curso legal que haya emitido, puedes solicitárselos a través de su web o, si lo prefieres, me preguntas a mi.
Resumiendo, la amistad es un tesoro invaluable que puede hacernos más felices y saludables. Así que si tienes un amigo en tu vida, asegúrate de valorar y cultivar esa amistad, porque quien tiene un amigo, tiene un tesoro 😉
Apreciado José,
“La AMISTAD es un TESORO, gracias por formar parte de mi FORTUNA»